Puerto Merizalde es un corregimiento ubicado en la zona rural de Buenaventura, Valle del Cauca. Ahí, en ese pequeño lugar nace Octavia Angulo, una mujer de aproximadamente unos 40-45  años, que desde muy joven abandonó la tierra que la vio nacer. Hoy, esta mujer dice haber perdido la cuenta de su edad, debido a que en su identificación, quedó con información incorrecta y hoy dice no recordar  la fecha en la que nació.

 

La “negra”, como las personas de cariño la llaman, es una mujer que dejó a sus padres, cuando cumplió 16 años de edad, muchos piensan que la decisión que tomó fue por cuestiones económicas, pero lo que realmente pasó, tiene que ver con la relación que ella sostenía con sus padres. Desde muy pequeña, se dedicó a servir a sus hermanos y a su madre, mientras su padre trabajaba y lo poco que ganaba lo perdía con amigas y en trago. Desde muy joven asume las riendas de su casa, trabajaba vendiendo cocadas en las calles y cada peso que ganaba, lo utilizaba para comprar pan lo que por mucho tiempo fue desayuno, almuerzo y comida para ella, sus hermanos y su madre.

 

Hablar de su madre le causa un poco de tristeza, siempre omite de su vida todo aquello que tenga que ver con la persona que la trajo al mundo. Todo esto se debe al poco interés que tuvo Maritza Ocoró, madre de Octavia, por sacar adelante a sus hermanos y a ella, porque su padre a pesar del ingreso económico que la pesca le daba, jamás cumplió con su responsabilidad.

 

Después de cada momento difícil en su vida, Octavia, decide llegar  la ciudad de Cali en busca de una estabilidad emocional y por supuesto económica, aunque nunca fue ese el motivo de su partida del corregimiento que la vio crecer.

 

Al llegar a Cali, se encuentra casualmente con su primo Octavio Ocoró, sobrino de su madre Maritza. Con él sostenía una relación muy unida de familia, pero después de varios meses de compartir una amistad más cercana, deciden iniciar una relación sentimental, a pesar de la unión familiar. Esta relación derivó en un embarazo no planeado. Octavia vivía con su primo como pareja. Él es maestro de obras en Cali y como decisión aceptaron el embarazo que jamás estuvo en sus planes y comenzaron a dividirse responsabilidades.

 

Octavia decide trabajar sin importar su embarazo y como primera opción,  buscó trabajo en un hogar de familia, como ayudante de aseo y cocina, lo que hoy es su único ingreso. Su primo y pareja sentimental decide abandonar “el barco” como lo interpreta ella y por supuesto la deja sin apoyo.  Ella expresa entre palabras tristes que en su pueblo es normal este tipo de historias, donde el padre abandona a la madre, donde entre familia se conformen otras familias y donde la pobreza es ocasionada por la irresponsabilidad de los padres, quienes deben tener la carga del mantenimiento económico y también cuenta que es normalmente visto que los hombres con hogar conformado tengan otras mujeres con las cuales también tienen hijos.

 

Hoy Octavia trabaja en un hogar de familia como empleada doméstica, donde recibe un sueldo que sólo le alcanza para sostener a su hijo -que tiene ya 21 años- y para el mantenimiento de su casa ubicada en el barrio Calixto en la ciudad de Cali.